Gracias compis. Quiero aclarar que el post baila entre la fantasía y la reivindicación, entre la asunción por parte de las setas de sentimientos humanos de los que evidentemente carecen y la concienciación sobre las consecuencias de una afición que año tras año va a más. Yo no estoy en absoluto en contra de la recogida responsable y sostenible de setas, y de hecho la práctico, aunque es cierto. como bien dice Diego, que cada vez disfruto más estudiando y fotografiando especies que consumiendolas
; pero si estoy en contra de la moda de recolección excesiva que estamos viviendo de unos años para aqui, donde de repente, todo el mundo sale a por setas sin haber estudiado nada, levantan todo, recolectan sin criterio y luego le llevan a un conocido todo ese desastre de recolección para que en el mejor de los casos les haga una selección, y el resto (o todo en muchos casos) a la basura. Por que he visto bajarse un grupo de 30 de un autobús, ponerse en fila con un metro de separación y arrasar con una ladera entera para buscar hongos, cuando la mayoría de ellos y ellas no sabían ni lo que buscaban. Porque facebook esta llena de fotos con cestas repletas de ejemplares.
La imagen de miedo en el bosque la hice la semana pasada. Fui a un rinconcito muy especial donde voy muy a menudo, un bosque mixto donde la riqueza de especies es enorme y donde conozco hasta el último rinconcito, y espero año tras año la llegada de las respectivas especies, y el espectaculo que me encontre era dantesco. Los "orcos" habían pasado por alli y no habían respetado nada, todas las setas levantadas o rotas, sin distinción, todas
, un reguero de barbarie al que no encuentro explicación. Os juro que la rabia que senti fue enorme y de ahi la foto.
Con esto quiero explicar que en las historias, la parte reivindicativa, en absoluto va dirigida a los recolectores informados, que aman la naturaleza y que realizan una actividad muy ligada a nuestra cultura de una forma sostenible (los que abundamos por aqui vamos), sino a esa marea de "orcos" que destrozan nuestros bosques por seguir una moda que estoy deseando que pase.
Un abrazo